UNA REFLEXION DE QUIEN PARIO UN ANGEL

La vida no es merecimiento ni castigo, la vida es la vida, simplemente eso. Nada en el mundo puede calmar tus dolores, cuando pierdes un hijo, que Es la prueba más provocadora que existe a un humano encarnado. Si fuésemos tibetanos, con una enseñanza mas mental que emocional, la mente no permitiría que sufriéramos tanto. Pero como nacimos en occidente, y nunca se nos pasaría ni remotamente por la cabeza la idea de experimentar semejante prueba debemos recurrir a miles de textos de diferentes orígenes para entender que nuestros hijos que se fueron de nuestro lado , lo hicieron para estar en un lugar mejor. Algunos ven a Dios como el viejito bueno de la barba blanca, otros ven a Dios en ti. Diferentes textos con un mismo fin calmar la mente, perturbada y el corazón destrozado, que por momentos intenta explicarle a la razón que ellos están junto a nosotros pero , lamentablemente nadie tiene la verdad. Y se nos va la vida, en esta tierra tratando de encontrar la razón de porque nuestros hijos partieron antes que nosotros, cuando por un orden natural, deberíamos ser nosotros quienes lo hacemos antes que ellos. Existen numerosos libros desde espirituales hasta científicos que intentan explicarnos diferentes cosas que la razón entiende, pero el sentimiento muchas veces no puede compartir. La realidad es que parece que no hay una sola vida sino muchas las que encarnamos, para aprender y lo hacemos justo en este denso planeta tierra. Si me pongo a profundizar y analizo minuto a minuto de nuestras vidas, nos duele su partida pero seguramente están mucho mejor que nosotros. La tierra es el lugar de aprendizaje del alma. El alma no entiende de maldad, de rencor, de odio y sin embargo los seres terrestres son egoístas, traicioneros, vengativos, competitivos y si sigo no paro de encontrar sinónimos. Si existiera un juicio en nuestras propias mentes ¿Quién no tiene ganas de romperle la cara a alguien que nos hizo sufrir durante una vida? Un padre que por dejar a una mujer, se aleja de sus hijos para siempre sin importarle que es de la vida de ellos y solo se mantiene por el temor de la justicia del hombre pues le sacan lo que ha conseguido y no importa si es para que coman sus hijos sino que no quieren que le toquen sus pertenencias. ¿Existe acaso alguna persona que genuinamente desde su más profundo sentimiento haga lo más maravilloso que hay en la tierra por sus seres familiares cuando se alejan de ellos? ¿Cuántas personas en la tierra , se paran frente aun chico de la calle drogado o alcoholizado y en lugar de pensar que ese chico le va a robar o de preguntarse porque esta ahí ¿ solo lo separa y lo juzga sin saber el porque de esa elección de vida de su alma. Nada en la tierra es perfecto, los seres humanos somos imperfectos. No hay profetas ni avatares MADRE TERESA hubo una sola y no habrá otra. Por eso las madres de aquellos que parimos esos seres que se fueron pues su misión de aprendizaje en la tierra se cumplió, nos deberíamos sentir orgullosas de eso y no doloridas, parir ángeles significa también ser un ángel, y¿ porque no? Considerarnos los vehículos de esos ángeles y despertar de una vez. Ver que nos queda por resolver y no volver mas a encarnar en este denso planeta de contrastes y oscuridades que mas de una vez no resolvemos por no mirar . Vamos Despertemos terminemos con el karma de una vez , Puede que digan que estoy loca pero si leer treinta libros y evaluar que en definitiva todos terminan en lo mismo . Nuestra alma sabia elige que necesita aprender, engendra su ser en una madre capaz de soportar la partida de su hijo y todo lo demás es bla bla bla. Seres divinos viviendo una experiencia humana MADRES DE TODOS LOS ANGELES QUE HAN PARTIDO DE LA TIERRA HACIA LUGARES DE LUZ Despertemos y vayamos con ellos pues esa es nuestra misión por algo nuestros ángeles nos eligieron, para ayudarnos a despertar esa pequeña materia final en la tierra, a veces le perdón, a veces la tolerancia, y aguantar este dolor que solo nosotras podemos llevar. No es mucho lo que nos falta para recibirnos de ángeles si parimos alguno. Las invito a reflexionar y que me cuenten que piensan de mi deliro Con amor Beatriz S Goldenberg